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MADRID (EFE).-;i.aBÍ , lnglaterra.toc,óáiriboshomb| \ hombre coríHa \espada de ji ^ cual .pronunció eií cererribníc tate^^ pero'^ás;^e.^n c|| cogió, de tristeza aqgei.ni| porque Ch^VIes Cfiaplin';^'n| la: criden y^slguiói^ su si|| Sus 85 años le pesatori;d# instante supremo. V-^ . , De todas,formas;<'€|l "sir" de lnglatefra);^cab|Í siempre había í^sidp /yag|| meses después, en i¿ últi||i junio/una noticia y. í^ü. || confirmaban. que el pretede."Can^ileias|^
Sostenido por dos^p|| rostro: fremendainente:^ Charles Chapnn\llegi5j#| París para sometet:sej'aH chequeo médico. í ', Los periodistas :áp|i| , cuenta de la presencí^ "Charlot^'^ en la capitaMI^ sencillo ser que inmpí'taliil ^vagabundo'' romántÍG(|g hongo Y grandes 2apat|s.:
\ Pero ese mismo,t|^ . S9cjb Y creo qúe'ttun(^^
películas de Charlot, c|ÍÍ \ generaciones enteras |d|s en que'prbtagonizó la:||| ativing'M;;haciendói^
Todo ün catálogo miserias del mundo aflW filmotráfíabde Chaplih, hümpr,c6moiarma c^ qije su natu al :com||eji|
T ocáí^eloev'í?^ ^v^ho>4íw. cVj i^ima a que los vea
Vx- o^r^fnni^^'r, ^mho^ ée los menos vib> {y^ ^^M' j^^^^g elementos)
Mi
),,^ f.e)s en punto ya esperábame^ ei t-^... ^;.p..;ábamos^.el café y ia ^^-^-^^^^
■iíaur. a ^^ervirnos üesde* étoic- 1&a3eo.o
reveT «^tiguos, b como un ^,]ag.o. ^,v5a e¿taba oscuro: un pie de] ^ol
poííé í-n -una larga mda del no. E... pnmer lerry ítel día acataba f0.^«-
Co/. lanío Irío. confiábamos efi Que <'«íé «vjf i-« ro«v caliente —ya .«^we ^j^soJ _
p;c.rr.ítm-ser tibio~-'y en <jue sh m|g«3| a la eima de la ™or4f.m
l}í"»F-TA €fe "isi época c5<^l afe Hi'eí/la <m casi cada noche a^í^^m^^B, llególes, los íragík«
ítesta^s^quepé^^peíí'
.:ii^aly;:ve:íi:ardi^^ ílJiípnsa^^-solitar^^^^^^^
£,eabiz|)a}p^:fCoJíbajo#vet^a^
.¿t,^^::Un¿;lCOB
•í^^^ítípsii^v^eneendidic^^
.UERME en la ponía üe un mástí) ^ . 4:-on los ojos íirmemenU' cejTadofe^. Debajo de é], cnélg^íí la^ -veJas . ~^ <omo sábana.s, vaye.aui ik- ya ieeno
11. .
l fuego
A tefc- wflí', im hombre salió al balcón.
Pf.r manfíió un minwto, sdo, en el balcón f^h;;^" 4m el rio por eBcima de nag^^B
.u.á.nle k -alcanzó los *™^"^^¿;í
,in',l «j/nple taaa de café y -un panecillo
4 pwso a desmigajar ^su cabeza -?tt«-Smen?e entre las niJbes, junio al .oL
¿E-^tabaJot* el hombre?' ¿Qué C'0.^^^j«=¿,
■„^-,„l8ba hacer, allá arribaren su
¿¡da cual recibió . una migaja, w.a. oiep ■
quí-'..Ife^^nos. arrojaron ^ff^^^J: "^^^ y ,n una ia.a una gota del c-fe. ^Enl^i^*
^ hubo í^oienes siguieron esperando el ro51sfg>o. ,/Puedo-contar Que m entonces. ^f^J^^^^
Una hermosa mansión.&s ^1^^^ al"sol ;• .,j.'¿»ba *,sus puertas,afoma ^ _í«í?J¿^
^■elevándosevhacia/''algúní^^s^ ^ato:^>"v?eneradoH:eníiesta^
5:,;Mt^0^Ms^::í^ue'-^:decyna;^^io^íMá
iS:^Mí^^díín;-5?^^ .^í^##í^P*w«Pfe-4Peí?de;^^ung
WY^MmmH •confio^; ■uiis-
tran¿4por1 a rp]/5 aM V se .^vjllc. dormido, como dorada esfera en ta punta o ascendió dentro d© un pájart»'dorado, o X'iegameme se instaló a bo'reajadas.
**Mé apovo en columnas de mármor', dijo una*nube. *^No me muevo nmca. ¿Ves allí las columnas, en el mar/ A salvo.eB )a inírob'pección, ^e^ásoma . ü ver Vás acuosas columnas de ^^^^^^^^^^
Bajo .^us alas, abríalas suyas^ unrgayí<>^f „ ,
x obseiVaba í^ue-el feire era "como marmol'>
^'Aquí arriba^', dijo él "me remonto ^ rm/^^
a través de] eieio. porque yuelan J »
las ala^ de máirmol sobre la P«^,5^..¡JrBÍ
' ^ , [tone
ROBERT REOFOR
í hombfe más s^xY.q época, forma rnancu^ Dustin Hoffn^ann enf que/sobró >!> Caso I gate,seencuentra,enj
Red^ofid .ha® ereacióri:desu0apel4 batjgoeé una lucha |f
entre., ambos ac« demostrar el pprqué|
ij^^ sitió de estrellas.: I
Ya desde ahora. I
medios- de. difüs|| tan;noís6loéltenp|
ta, sino la. Po!|i| causará.
.......3.... en ia punta de m inpást^
conj los ojo^ muy bien cerrados. ^ Indaga .«-u sueño ia gaviota,
y el sueño era: "No debo caer. ^ '^ ^ . ' He^plandecier^t a mis pies, el -mar cjwi^^ 1 [que í-a^sa
Eí= dyr§ eb0)O lo%- a3am©ntes:-quieiie/-destt^^^^
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